lunes, 18 de febrero de 2013

martes, 5 de febrero de 2013

Madrugada.

De madrugada siempre
los cielos son más oscuros y las ideas más claras.
Por eso siempre te imagino a lunas llenas
y tragos cortos de cerveza.
Porque cuando los lobos aúllan,
y las prostitutas salen a bailar con las farolas,
y los alcohólicos empiezan sus jornadas de trabajo,
y los insomnes sueñan con almohadas,
y las niñas cursis con caballeros medievales
es cuando estoy realmente despierta
y puedo pensarte sin luz y con ganas.