jueves, 17 de marzo de 2011

Por cierto, qué borde.

Ni lo comenté.

La verdad es que estoy en clase pero me apetece hablar de París.

Fui. Primero al aeropuerto de Barajas, temblando y con ganas de huir. En la cola de embarque estaba en el suelo, sin poder respirar, y sin poder llorar. De repente Alfredo se levantó, empezó a hablar por el móvil, y se le cayó. Se le cayó JUSTO EN MI CABEZA.
PLOC!
Y así, sin más, pude llorar. En 5 minutos agoté mis lágrimas y me subí al avión. Y no, no era para tanto. No es que me gustara en exceso, pero no estaba tan mal...

Y llegué, así, sin más. A las 8 y media de la mañana estaba en París. PLUM! Magia!
Fue increíble. Y no tuve ni meeeedia ansiedad!

Estuve una semana, y me dio tiempo a ir a Versalles y a Disney (sí, ¿qué pasa? me pueden gustar Maria Antonieta y Mickey a la vez).
Y la Tour Eiffel, y el Sena, y el museo de Orsay, y Montmartre, y los macarons... (imaginad una nube de amor en mi cabeza mientras digo esto).
Los detalles me los voy a ahorrar, porque fui con Alfredo, y no son cosas que quiera contar aquí, pero en resumen, fue brutal, me sentí como no me he sentido jamás, y creo que me gusta incluso más ahora que estoy en Madrid, y pienso en ese otro sitio, donde todo el mundo habla en francés :)
Me escaparía allí de vez en cuando, sí.

3 comentarios:

Sofía dijo...

Que lindo, Paris! Debe ser realmente hermoso

Καρωλινη dijo...

¿Estudias Imagen y Sonido o Comunicación Audivisual, como se llama ahora? Éso quiero estudiar yo el año que viene, si es que me llega la maldita nota.

Yo también hice una crónica de mi viaje a París, pero todas las palabras se quedan pequeñas para expresar lo que uno siente cuando va a allí. Es indescriptiblemente mágico. Quisiera volver y vivir allí un largo tiempo, estoy enamorada de ese lugar.

Saludos :)

No soy Coolhunter dijo...

Dí que sí!
Yo estuve 2 días en Paris y 3 en Disney.Mi novio y yo nos colamos en el Hotel ,esperamos la cola con 378 niños de 5 años ,allí dignamente y nos hicimos una foto con el ratón Mickey.Al día siguiente volvimos a por Pluto